Mi engreída Josselin

  Josselin siempre fue una niña muy cariñosa, constantemente le pedía abrazos su madre, y besos en la mejilla a mí, su padre. Quería jugar todos los días en el enorme jardín que tenemos, correteando con su faldita que hacía vaivén por el viento mientras ella imaginaba que podía volar, con su muñeca de trapo en un mano mientras decía “¡Vuela más alto!”. Su simpatía le causaba ternura a todos los adultos que la conocían, era como si quieran abrazarla hasta hacerla explotar. Desde pequeña tenía actitudes raras cuando se trataba de mí. Cuando llegaba a casa, ella siempre gritaba “¡Papi!” y venía corriendo a mí sin dejarme cerrar la puerta por completo. Quizás les parezca normal, pero lo raro llegaba cuando intentaba saludar a mi esposa con un beso en los labios y Josselin me interrumpía. Me jaloneaba y me decía “Cárgame papi cárgame” o a veces solo me decía “Ven te quiero mostrar algo que hice” e impedía que saludara a Beatriz, mi esposa. Cuando caminábamos los tres por la calle ta...

Mi amiga y su pasado ninfómana

Hace muchos años estuve en contacto con Ani, una chica ecuatoriana con la coincidí por casualidades de la vida. Como siempre comenzamos como esa desconfianza no de reservarnos los secretos para cuando nos conozcamos mejor, hasta que ese día llegó. Ani y yo nos volvimos muy unidades en poco tiempos pues compartíamos varios gustos. Uno de ellos era el sexo. 

Todo iba bien con Ani, pero las cosas mejoraron cuando me contó una marañado de secreto que tenía guardados que pretendía llevarse a la tumba. Tan parece que era más libidinosa de lo que yo pensaba. Su historial de sexo era muchísimo más extenso de lo que cualquier chica cree tener con apenas 22 años. 

Una estudiante de psicología cuyo pasado consistía en sexo con desconocidos, con amigos, profesores, familiares, familiares de amigas, y quizás uno que otro chupada de coño con alguna chica que se le haya antojado. Digo "quizás" porque nunca me contó algo sobre algún enredo sexual con alguna chica, pero con lo que me contó siento que algo pasó con alguna. 

Estaba con ella ya muy noche en el cuarto que alquilaba, un cuarto pequeño con baño y nada. Decidimos comprar una botella de vodka con un Tampico para animar un poco la noche. No era de esperar que nos picáramos un poco pues no servíamos el vodka como vikingas, apenas lo diluíamos con el Tampico. 

- Tuve un recorrido muy largo en el cole, quizás todos hablaban de mí a mis espaldas, pero no me importaba. Yo solo disfrutaba de lo que otras se perdían - decía Ani estaban ya medio ebria. 



Ani me cuenta en sus años escolares disfrutó coger con varios de sus compañeros (y no tan compañeros) en los baños del colegio. Tan solo tenían que hablarle bonitos para convencerla y poder disfrutar de una mamada, luego, ella se alzaría la falda o haría que el chico se siente en el inodoro para ella sentarse encima. 

Me gustó lo abierta que fue al decirme esto, se notaba que no tenía nada de culpa que en verdad disfrutaba de esos momentos. Cuenta que a veces eran dos los que querían con ella, pero solo podían entrar uno por uno para, mientras uno se la cogia, el otro hacía de guardia para avisar en caso otra persona llegara. O que a veces era ella quien coqueteaba con el chico que se le antojaba ese día. 

- Era fácil, solo tenías que insinuar y ya, ellos casi que se desesperaban para llegar al baño. Aun que no siempre era ahí. Había un tipo de descanpado cerca de la cancha de futbol en done había unas plantas medias grande. Nos agachábamos y cogiamos ahí. Era un poco con adrenalina pues cualquiera podía pasar y ver lo que hacíamos. 

Lo más sorprende es que no solo eran alumnos, los profesores conocían a su alumna y se aprovechaban de ello. Pero ella sin temor y sin hacerce del rogar aceptaba. 

- Solo hacían que me quedara al final de la clase, al comenzar el recreo, y ellos me hablaban y me decían que la gente habla mucho, que no creían que yo no era así. Pero luego comenzaban con su "eres buena alumna" y eso, luego empezaban "eres bonita" y ya sabía a donde iban. Pero me gustaba, como digo ellos a veces solo querían que se las chupe o que me deje tocar un poco el coño. Eran más caballeros que los alumnos. Lo malo es que todos eran casado, lo bueno es que eso me gustaba - río un poco al decir esto último. 

Hasta ese punto quizás pensará que sus notas era elevas por estar haciéndoles "favores" a los profesores, pero ella negó el hecho. Si era buena alumnas, de las mejores dijo, pero sus mamadas no interferían con sus notas, que todo logró fue por ella. 

La verdad no me sorprende, era de las mejores en la clase y tenía ese pensamiento rápido que lo saca a uno de apuras, daba consejos exactos cuando los necesitabas, era ella quien organizaba los grupos, los proyectos. Un día la vi sacando cuenta del gasto que se hizo en un proyecto que hicimos en la uni mientras hablaba con una amiga acerca de las habilidades cognitivas en los niños a la vez que jugaba CLASH ROYALE en su celular. Hizo las tres cosas al mismo tiempo sin siquiera presentar algún signo de estrés y cumpliendo con todos. Incluso ganó la partida de Clash. 

Ani no se limitó al colegio, como mencioné, también lo hizo con varios familiares MUY CERCANOS a los que ella les vio el gusto cuando ya estaba grande. 

- Vi a mis primos y estaban buenos, así que los llevé a mi cama. Vi a algunos tíos y me llevaron a sus cama - bebe una baso de vodka - ¡admite que viste con ojo de coger a algún familiar y no me mires así!

No se lo negué, en verdad tuve y tengo pensamiento morboso con varios allegados, pero no puedo hacer nada al respecto pues existe un "equilibrio" que no puedo romper en la sociedad, de lo contrario todo sería un mundo de mierda sobre mis hombros. En cierta forma envidio a Ani, a ella no le importa el "que dirán", ella supo disfrutar si vida. 

Me contó algo sobre ciertos padres de algunas amigas que solían llamarla para preguntar sobre "el comportamiento de sus hijas" pues ella era su amiga. Es obvio que no querían saber un carajo sobre sus hijas, pero vuelvo a decir, a Ani no le importaba. A pesar de que la invitaban a hoteles o cosas por el estilo, ella pedía estrictamente que sea en sus casas pues tiene cierto morbo de hacerlo en el lugar donde conviven con sus familiares. 

Una de sus historias consistía en que una ves fue a visitar a su amiga por su primera comunión. Había organizado un tipo de almuerzo en su casa. Desde que comenzó el almuerzo ella no quitaba los ojos del padre que, según ella, se veía como el padre amoroso que cuidad de su familia. Fue eso lo que le llamó la atención pues no lo dejaba de mirar.

Tarde o temprano el padre se iría algún lado de la casa y ella se iría detrás él. Lo siguió hasta su oficina en donde lo encontró acomodando alguna hojas. Ella entró pidiendo permiso y preguntando "¿Por qué no está en la fiesta?" tuvieron una pequeña charla, comenzaron los coqueteos y luego los juegos en donde uno se mira al otro como diciéndose "te voy a coger aquí sin importar nada" 

- Era eso lo que me gustaba de ellos, verlos calientes ya listos para comenzar a coger como enfermos mañosos - ríe derramando un poco de trago en sus piernas - y sí, cogí con él resto de la fiesta y ni mi amiga y ni su esposa se enteraron a pesar de estar ellas en la casa. No me culpes, creo que la señora tenía en temporada seca a su marido porque recuerdo que el señor me agarró con mucha desesperación - volvió a reír y yo la acompañé a reír. 

Algo que me sacó un poco de onda es que en la fiesta llegaba a coger con 4 o 6, tipos completamente desconocidos que ni se tomaba el tiempo de preguntar sus nombres. Tipos con los que no volvía a tener contacto en su vida, y si se los encontraba, no les dirigía la palabra, contaba.

- Era fácil, solo bailaban conmigo un poco y cuando veían que estaba aflojando me preguntaban si quería hacerlo. Yo aceptaba y me llevaban al baño para hacerlo, luego me les alejaba y ya, otra presa a quien cazar - contaba con una sonrisa en el rostro - lo que más me gustaba de eso es que cuando ya había cogido con alguien, buscaba a otro y bailaba un poco para besarlo y llevarlo al baño mientras el anterior veía todo lo que hacía. A veces incluso era uno de sus amigos del grupo en el que estaba u otro que me estuviera haciendo ojitos. Habían unos re buenos pero que eran muy tímidos, yo tenía que tomar la iniciativa y llevarlos al baño. 

Después de un par de historias le pregunté como fue que comenzó con todo esto. Pasó a contarme su primera vez, su primera cogida, con un chico con el que hablaba ya meses por Facebook. Un día la invitó a su casa y ella simplemente aceptó. Al llegar se da con la sorpresa de que el chico no está solo, está con amigo. Pero no le importa ni al chico tampoco y rápidamente se la lleva al cuarto para comenzar. 

Ya la había penetrado, y ella estaba encima de él disfrutando de su primera verga  cuando de repente entra el amigo del chico y se acuesta en la otra cosa (el chico compartía cuarto con otra persona) y no se da cuenta de que están cogiendo. Esta parte me preció rara pues era obvio lo que hacían, hasta que Ani continuó contándome. 

- En verdad el chico si sabía lo que estábamos haciendo, solo que se hizo el tonto y se acostó en la otra cama y se tapó con la sábana. El chico y yo como que nos asustamos pero nos dejó de importar después de un rato y seguimos en lo nuestro, hasta que escuchamos ciertos ruidos. Era el otro chico marturbándose desde la otra cama, escuchándonos coger. 

Medio turbio su primera vez la verdad. Se supone que ese momento debe ser glorioso para muchas pero pareciera que para ella fue una comedia porno o algo así. 

Ella continuó hablando - El chico con el que estaba le pregunta que estaba haciendo, el otro dice algo tonto como "no me di cuenta que estaban ahí". Creo que ya lo había planeado. La cosa es que luego el chico el pregunta si se quiere unir y otro dice "solo si ella quiere". El chico me pregunta si quiero y yo en plan "ehhh no sé que decir" y el chico me dice "di que sí" y yo pues hice caso y acepté. El otro chico se descambio y se puso atrás de mí mientras yo estaba arriba del otro y me la metie por el culo. Al principio dolió pero le encontré el gusto. 

Hay que ser valiente para aceptar un trio en tu primera vez, sinceramente yo me hubiera asustado y hubiera salido corriendo de ese lugar. Creo que ese pensamiento a hecho que no tenga una vida como la Ani, así de placentera hasta fue su pasado, y me encanta. 

Algo de lo que me di cuenta durante todas sus historias es que no hay un "chico especial", todos los que me cuenta son sexo y adios. Eso me llevó a preguntarle:

- ¿Nunca te enamoraste de alguno?

Ella calló unos segundos antes de responder - La verdad no que recuerde, pero hubo un chico que si me atraía mucho, me agradaba estar con él, era piola. Me hacía reír y me sentía cómoda cuando estaba a su lado. Pero no pasó nada con él, nunca lo hicimos a pesar que tuvimos muchas oportunidades - Ani se queda pensando un poco con el seño un poco fruncido - no sé por que nunca pasó nada Alonso. 

Creo que en ese momento toqué una yaga que aun no había sanada, así que rápidamente le cambie de tema. Le recordé como eran los tiempos antes de la universidad y nos pusimos a hablar entre risas y más alcohol. La noche terminó y tanto ella como yo nos quedamos dormidas en la cama hasta el día siguiente. 

Ani dejó la universidad más tarde y se regresó a su país de origen, Ecuador. Estuvimos hablando por un tiempo pero luego se desconectó y nunca más volví a saber de ella, menos las chicas de la uni. Decían que no se sabía nada de ella desde que se fue. 

Ani es una de las personas que tocaron mi corazón, era una gran amiga con la que podías contar a pesar de la situación en la que ella se encontrara. No solo eso, sus historias tienen gran influencia en mis relatos, casi que se diría que uno que otro de los relatos publicados aquí es una historia real que ocurrió hace muchos años y que solo Ani pudo vivir en carne y hueso. Aun siendo sincera, ella lo hubiera contado mejor. 

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